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Postal Urbana

Todavía de más allá

Actualizado: 2 feb 2020

“Si te molestan por su acento o atuendo, por sus términos raros para nombrar lo que tú llamas con distintas palabras, emprende un viaje

No a otro país

(ni siquiera hace falta): a la ciudad más próxima.

Verás como tú también eres extranjero.”

José Emilio Pacheco, Desde Entonces, Poemas 1975-1978


Se asomó por la ventana del piso 12 de una de las avenidas más importantes de la ciudad, sus ojos, sensiblemente irritados lo decían todo, casi no quiso comer y el único comentario que realizó fue una pregunta para ella misma: ¿Por qué si al aguacate le eché limón se puso negro?


A una pregunta abierta, todos intentamos responder de forma sensata, inverosímil, convincente y hasta sarcásticamente.


Terminó de comer, se limpió la nariz y lo que quedaba de lagrimal en los labios, antes de salir volteó nuevamente a la ventana, miró hacia un horizonte completamente lejano, ahí perdió la mirada, segundos después salió.

Al día siguiente no se presentó, su belleza no permite que uno deje de notar su ausencia.


Hace dos semanas, se la pasó viendo fotos de la playa, los yates, la mar azul, la fiesta, y diciendo: ya falta poco para las vacaciones, para la semana santa, ya tengo autorizados mis días, esta vez volaré vía Panamá, no quiero que me pase lo del año pasado que llegué a Miami y luego ya no pude volar porque cancelaron todos los vuelos a Venezuela por restricciones del gobierno de Estados Unidos, espero que no suceda nada extraordinario.


Hoy exactamente a medio día leyó una noticia que súbitamente le agradó, entre risas y bromas fue a preguntarle a su jefe, también compatriota, qué si el regreso de las transnacionales le daba esperanzas para volver, y si era el momento de renunciar y regresar, guardó su lonchera y su aguacate, no había internet en la oficina, así que aprovechó para cerrar todas sus aplicaciones, bolsas y demás.


Su jefe le dijo a Brigitte: lo único que va a pasar es que el gobierno va a dar una concesión para poderles pagar algo de la deuda que les deben, las cosas van a seguir igual por lo menos un par de años más, así que acomódate y aprende a vivir en esta ciudad.


Brigitte le preguntó a su jefe: ¿Tú no piensas regresar?


Yo sí respondió, pero mi familia ya no, están hechos a la vida de Houston, mi hijo el mayor tenía cinco años cuando dejamos Caracas, con sus hermanos habla inglés, y muy poco el español, ahora que estuvo por acá se le pegó algo, no les gusta este país ni esta ciudad, ya están habituados a vivir por allá.


En dos años, tu hija no querrá regresar al Faro, es linda la playa, la mar, los yates, pero uno es de donde vive y no de donde nace.


Ojalá las cosas cambiaran. Llevo 14 años fuera de Caracas, soy más de aquí que de allá y mi esposa y mis hijos son todavía de más allá.


Víctor Alba

Ciudad de México



Víctor Alba escribe lo que ve, lee y le gusta, lo hace como una necesidad de poder continuar y seguir adelante, es algo que lleva adentro.

Blog: bicicletacafeypoesia.wordpress.com

Twitter: @victorginec

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